miércoles, 20 de julio de 2011

The End

Hay maneras de despedirse, pero la peor de todas es en la que parece que sales corriendo. He dejado ese motel de Sunset bulevard a la carrera, casi sin revisar si me había dejado algo. Sé que ir a un aeropuerto con 4 horas de margen puede parecer una barbaridad, pero cuando hay factores que no controlas en una ciudad desconocida es mejor tener margen de maniobra. Además debía dejar el coche, el Ford Edge que me ha acompañado durante más de 2300 millas en 13 días. Me ha dado pena, es un auténtico cochazo que gracias a sus características ha hecho de esos 3600 kilómetros algo muy placentero y seguro.

El aeropuerto internacional de Los Angeles no tiene nada que no tenga ningún otro. Bueno, no tiene las tragaperras de Las Vegas. Tampoco tiene medidas de seguridad que no tuviese el JFK de Nueva York y también están presentes esos comportamientos " peliculeros" de los encargados de que pases por el escáner. Repito,  como dije en el post de la salida de NY, que entiendo las medidas aunque sean exageradas, pero no las formas. Un asiático que no tenía manera de hacerse entender no ha recibido la ayuda que requería de la gente del aeropuerto. Menos mal que estábamos algunos alrededor para echarle una mano.

Puerta 42B. Gente que te habla aunque lleves puestos los Beats y mucho barullo alrededor. La escala en Dallas se puede complicar por un pequeño retraso en el repostaje del avión. Sólo tengo 40 minutos de margen y ya los he perdido. En el momento de despegar llevamos una hora de retraso. La sorpresa en el vuelo es que hay wifi. Por 7'95 $ puedes engancharte ilimitadamente a la red. ¡Incluso he llegado a ver parte del España - Alemania de baloncesto Sub20!. Pero la preocupación estaba en saber si podría coger mi enlace a Madrid... y ha habido suerte. Me ha salvado que éramos varios los que usábamos esa ruta y el vuelo de American ha esperado.

Nueve horas y cuarto de vuelo. Junto a mi viaja un Coronel retirado del ejercito americano que lleva durante todo el viaje sobre sus piernas un dossier  de un arma de combate que comercializa la empresa a la que asesora. Hablaba solo y parecía algo raro, bastante. No ha molestado y eso es lo importante. El mensaje de la megáfonos al aterrizar ha sonado demasiado solomne: "bienvenidos a Madrid, capital de la Monarquía Constitucional de España". Buen cierre.

Y hasta aquí. Ha sido reconfortante escribir todas estas cosas que en otro tipo de viaje jamás hubiese contado. El blog me ha ayudado a no sentirme solo, a tener una sensación de compañía. Era el propósito y se ha cumplido. Incluso ha habido cosas que he dejado de contar. La persona que ocupó el sitio de Jessica en NY, el palo en impuestos al recoger el coche en Las Vegas, el GPS que se apagaba en los momentos más inesperados, los 18 dólares que pagué en el Luxor por una piña colada en la piscina, la inquietud en el Area 51... muchas cosas. Pero me he sentido bien y útil. Espero haber ayudado si os apetece viajar por aquí o si simplemente os he entretenido con mis cosas. Vosotros habéis cumplido de sobra, nunca hubiese esperado un seguimiento así. GRACIAS.

P.D Es momento de pensar en que va a ser de este blog ahora... y creo que lo tengo claro, aunque escucho propuestas.

7 comentarios:

  1. Bueno no tenías que haberlo titulado "The End" sino "Punto y seguido" porque espero que sigas dandonos relatos, ya que ha sido un blog de viajes, creo que deberías contar vivencias(que no tendras pocas) de tus viajes y que no perderse en esos parajes.

    Ahora creo que tendrías que hacer como el As, pero distinto.

    Lo Mejor, Lo peor, Que no perderse y que te dejaste por ver.

    Un abrazo y Gracias a tí a mis amigos les ha servido para saber que ver cuando vayan en breve a USA

    ResponderEliminar
  2. Vitoriano!! Vaya vacatas te has pegado, macho, si no fuera porque tengo tu edad diría eso de "de mayor quiero ser como tú".
    Oye, una duda, si hubieras perdido el enlace en Dallas qué habría pasado? Te meterían en el siguiente vuelo a Madrid?
    Siempre había pensado que en esos vuelos SIEMPRE se esperaba a que llegara el avión anterior, no sé por qué...

    ResponderEliminar
  3. Gracias a vosotros!!!!
    Jon, esperan casi siempre al ser de la misma compañía, pero puede darse el caso de que te dejen en la estacada... no siempre esperan.

    ResponderEliminar
  4. Ni se te ocurra dejar el blog abandonado,eh? Ha estado genial que compartieras el viaje así

    ResponderEliminar
  5. Gracias a ti Hector por entretenerme durante una hora entera de mi vida que he dedicado a leer del tirón tus aventuras por los USA. Me has hecho viajar sin salir del sillón. Espero poder hacer algún día un viaje similar.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  6. Gracias por el comentario Jose :))

    ResponderEliminar